Origen: Saariselkä (09:33h) Destino: Kempele (18:19h) Km: 502.6 Tiempo: 4:58 Consumo: 5.9 l/100Km Alojamiento: Forenom Aparthotel Kempele 84.60 EUR
Con la idea de evitar al máximo las vías principales y buscar la máxima gravilla posible me pongo en marcha rumbo sur. La ruta la tengo planeada, pero la previsión es de lluvias a partir de los próximos 100km. Y así es! Los primeros 100km pasan sin pena ni gloria, de nuevo más pendiente de no chocar con un reno que cualquier otra cosa. Paro a repostar y veo claro que las rutas por tierra van a tener que ser otro día: el cielo se oscurece y me toca ponerme el traje de agua. A pesar de seguir dentro del círculo polar, tenía la (falsa) sensación que hacía menos frío, con lo que me he puesto una capa menos en las piernas y creo que no debería haber hecho eso.

Con un leve chirimiri llego a Rovaniemi. Es todo un complejo el que tiene montado Santa aquí, con restaurantes, tiendas de souvenirs y diferentes atracciones. Busco su taller donde sentado cómodamente te recibe con un perfecto «Bon dia». Una breve charla donde le confieso que yo soy de Baltasar y se despide con un perfecto «Adeu»; todo un políglota. La visita y la charla es gratuita, pero si quieres la foto has de pasar por caja y ya puedes preparar la cartera!
La lluvia se intensifica al salir de Rovaniemi y dudo si quedarme aquí o avanzar; mañana dan buen tiempo y voy bien de calendario. Al final tiro abandonando la idea de hacer más pistas laponas. Mi nuevo objetivo es llegar hasta Kajaani pero un desvío me lleva dirección oeste hacía Kemi, con lo que hago números y buscaré donde dormir por Oulu. A pesar del traje de agua y de estar relativamente seco, la humedad me ha ido calando y estoy helado de frío. Por suerte las previsiones son que no me toca más agua hasta Estonia.